El Boulevard

Positivo: Lo peor las cammareras no sé ni cual decir pero cambio de plantilla para todas maleducadas tendrían que pasar un curso de atención al cliente antes de tebajar cara al público sino que se queden en su casa

Positivo: La camarera se esforzó en servirnos todo lo "bien" que pudo y mantuvo una buena actitud durante la cena. El metre acudió a nuestra mesa por cada queja que tuvimos. Pero no basta con la intención que tengas, si al final acaba en nada

Negativo: Nefasto, para pedir la hoja de reclamaciones. Aunque vayas con las expectativas muy bajas, te decepciona. Lo de este sitio es subsrealista. Medidas covid... Cero. No piden nada para entrar, y ya no hablo de vacuna o antígenos, es que ni que te pongas la mascarilla hasta la mesa o si te levantas al baño (como en TODOS los sitios). El personal va SIN mascarilla (la camarera, el metre, en las barras, ni el pobre chaval que recoge vasos) y obviamente con la música alta, se pegan a ti para hablar. Dentro, no esperes ver a nadie con ella ni en la barbilla. Respecto a la comida/ servicio: -el vino de la casa inbebible, somos 11 y todos coincidimos hasta el punto de devolverlo (se sorprenden de que te quejes del vino pk nadie lo ha hecho antes, viendo la clientela, no te sorprende). Pagamos otro fuera de carta. Opción que no nos dijeron que estaba disponible al preguntar sobre el vino cuando pedimos la bebida. - cuando te traigan los primeros "a compartir"... Bienvenidos a los juegos del hambre pk no hay una pieza (de cada uno de los 3 tipos de sushi que traen), por persona. Tendrás que partir un maki por la mitad y solo oler los otros. Nueva queja. Solución? Ofrecen traer más guiozas, (cosa que si que habíamos podido probar todos), reiteramos que el problema no esta en las guiozas y nos dicen que nos traerán una de sushi por persona. Acaban sirviendo más guiozas (mientras comemos el segundo después de esperar un buen rato sin nada en la mesa) y el sushi... Todavía esperamos. - los primeros, fríos. (guiozas fritas frías, edamame frío). Y la salsa de soja, llega cuando ya casi has acabado pero no la recojen hasta pasados los postres. -segundos a escoger: pide salmón, por lo menos la porción es correcta y está bien cocinado. Con la carne no se aclaran con los puntos de cocción y los fideos están excesivamente duros y la ración es muy escueta. -postres: en la carta inicial (pq una vez llegamos, pagamos y nos sentamos, nos dicen que la carta ha cambiado...) Habían 3 postres, ahora solo 1. "Fruta variada". Pagas 30€ por cenar y el postre en una cena se convierte en "fruta variada". La camarera nos dice que al final tmb hay mochi. Tienen de 3 sabores, pero no intentes escojer si quieres te verde, nata o vainilla (oferta que tienen) pk te dicen que los ponen como caen. Nos sirvieron vainilla, a todos, o eso nos dijeron, pq era nata. Suerte que no tenemos alergias ni intolerancias. -Sabían cuántos comensales éramos con antelación. Faltaron sillas y platos. Tuvimos que pedirlo varias veces e incluso alguno de nosotros tubo que empezar a comer sin plato -faltaron cubiertos durante toda la cena. El postre lo comimos con las manos cansados de esperar. -copas: pides un alcohol por su nombre y marca, te dicen que SI que lo tienen y te sirven otro pk "es lo mismo y siempre lo hacen". Todos sabemos que la calidad/sabor de un puerto de indias es la misma que un Beefeater pink... Saben tan igual que con un sorbo te das cuenta que te están tomando el pelo. Al reclamarlo se molestan pero asumen la cagada. -las sishas: la chica que las ofrece es muy impertinente. Lo dejaré aquí. Ni una a derechas. Fallan hasta en lo más basico. No volveré segurísimo.

Positivo: Todo fue genial limpio la comida buena ambiente guay

Positivo: Atención del chef

Positivo: Decoración moderna muy atractiva. Muy buen servicio y menú de Navidad.

Negativo: La entrada por el ascensor esta descuidada.

Positivo: Exclusivo y sorprendente.